Emplazamiento. Alcoy, Alicante, España
Fecha. 2006-2008
Superficie. 1583m²
Las leyes del agua y de la tierra determinan las decisiones arquitectónicas del conjunto industrial del Molinar, y le confieren ese alto grado de equilibrio entre el hombre y la naturaleza que nos explica Cavanilles en su descripción del conjunto a finales del siglo XVIII:
“Apénas salen las aguas de aquel círculo, y empiezan á baxar por el barranco, hallan freqüentes presas, por donde se dirigen á los molinos, batanes y canales de riego, y despues vuelven á caer al barranco para mover de nuevo los molinos, que en anfiteatro siguen hasta el fin de la cuesta…y la multitud de hombres, niños y mugeres que andan ocupados en servir las máquinas o cultivar el suelo, forman un conjunto pintoresco, vivo y agradable, donde las aguas y la tierra sirven útilmente á los hombres, obedeciendo exáctamente las leyes que les ha prescrito la industriosa pericia.»
LAS BÓVEDAS DE ARISTA
La bóveda de arista que se generalizará en el valle está construida con plementería de doble rosca de ladrillo manual de 29 x 14 x 3 cm que se inicia desde los galces laterales de arcos fajones semicirculares de sillarejo, de 2 x 2 x 0,5 palmos en las dos direcciones, apoyados sobre basas de arranque de una vara de lado o pedestales de sillar. Estas bóvedas basan todo su sistema de medidas en el palmo valenciano (22,5 cm) y la vara valenciana (4 palmos o 90 cm).
La recuperación de suficientes piezas de ladrillo originarias permitió la nueva construcción de unas bóvedas que, posiblemente sustituidas a lo largo del uso del edificio por un forjado de madera y yeso, encontraron por fin el reposo de la unidad conjunta de toda la planta baja abovedada.
La vulneravilidad de las bóvedas a la acción de las cargas puntuales se resuelve “postensándolas” con una sobrecarga adicional uniforme que consiste en el relleno del extradós con grava, de gran coeficiente de balasto y su posterior solado, conformando una estructura monolítica, gravitacional y estable. Así las sobrecargas puntuales de uso quedan amortiguadas por la sobrecarga permanente.
Las desventajas del forjado unidireccional de vigas y viguetas de madera y revoltones de yeso, motivaron la implementación de una retícula de jácenas y viguetas de acero para rigidizar el conjunto. Esta estructura suplementaria se conoce como “enguilat” o “anguilado” y su objetivo es reducir las luces del viguerío de madera con el mínimo peso de acero.
Se reposicionaron los perfiles para apoyar el forjado de tal modo que la preexistencia del “anguilado” dio la solución lógica formal y constructiva del nuevo forjado colaborante puesto que la disposición regular de los nervios IPN180 a los quintos de la luz también resultaba ventajosa para el apoyo de las chapas grecadas.
UNA CERCHA PARA HILAR
La necesidad de emular los áticos de las hilanderías de Bolton (Inglaterra) para albergar las máquinas de hilar de usos múltiples exige una transformación tipológica hacia la planta libre. Para ello se aumenta una nueva planta apoyada sobre la estructura de pilares heredada y, para la nueva cubierta, se utilizan cerchas mixtas de madera y acero de 12 m de luz construidas según los modelos de cerchas trianguladas que los manuales de construcción ofrecían en sus dibujos. Una vez que los técnicos eran capaces de calcular los esfuerzos, los nudos y articulaciones teóricos, al ser susceptibles de interpretación, eran materializados por los oficios de los talleres que construían soluciones sui géneris. La particular interpretación que se hacía de los sistemas constructivos transformaba el aspecto de los edificios y añadía la utilidad buscada por los fabricantes para recibir y montar sin impedimentos las grandes máquinas lineales y continuas de hilar.
Los alzados y sus modificaciones no se adscriben a un fenómeno local sino que se producen simultáneamente en lugares tan alejados entre sí como ajenos a las cuestiones iconográficas. El pragmatismo de su veracidad funcional y constructiva los traslada más allá de las fronteras de su entorno inmediato. El alzado al valle de la fábrica de Els Solers posiblemente nunca fue dibujado sino construido desde el interior.
Artículos y publicaciones
Revista Molinum
